¿Por qué en España e Italia la marihuana se mezcla con tabaco?

Tuve que viajar a los Países Bajos para darme cuenta de que el ritual que tenemos en España para liarnos un cigarrillo de hierba no es el habitual en otras partes del mundo. “¿Sois italianos?”, nos preguntó la camarera. “No”, le respondimos, “somos españoles”. “Da igual, italianos o españoles, está prohibido mezclar el cannabis con el tabaco dentro del coffeeshop”, se aseguró de que nos quedaba claro y cuando movimos la cabeza asintiendo, sonrió y apostilló. “Si queréis hacerlo, podéis fumar fuera, en la terraza”. “Un momento”, pensé, “¿entonces aquí la gente se hace el porro solo con la marihuana? “¿o es que no está permitido dentro del local porque el humo sería insoportable?”.

¿Ahorrar marihuana y estirar la cantidad de hierba algunos días?, ¿disfrutar de un efecto más suave y controlado?, ¿conseguir una combustión más fuerte y uniforme? No hay una razón que sobresalga como la ganadora sobre las otras, cada persona tendrá sus motivos. Pero lo cierto es que esta práctica de mezclar cannabis con tabaco es común en algunos países de Europa, pero es muy poco habitual en Estados Unidos o Australia.

Las leyendas urbanas no dejan de sorprendernos. Hubo un tiempo en el que se creía que la gente elegía esta famosa mezcla porque podía colocar más, porque se incrementaban los efectos del cannabis. Sin embargo, un estudio del University College of London echó por tierra esta teoría, ya que un porro con tabaco o sin tabaco sigue teniendo el mismo efecto. Esta investigación demostró también que esta combinación podía incrementar de forma temporal la presión arterial y el ritmo cardiaco. O sea, malos compañeros.

En 2017 la compañía de investigación independiente con sede en Londres, Global Drug Survey, publicó un estudio con una muestra basada en la experiencia de 69.000 usuarios,  que desvelaba que los países que mezclan cannabis y tabaco pertenecen a Europa. Italia ocupaba el primer lugar del ranking, siguiéndole de cerca Grecia, Hungría, Dinamarca, Suiza y… ¡Países Bajos! (Sí, no solo nosotros nos liábamos el cigarrillo con esta mezcla). Después venían Bélgica, Portugal, Francia, Austria, Alemania, Irlanda y, por fin, en el doceavo lugar, España. A la cola de esta lista estaban países como Australia, Nueva Zelanda, Canadá, Brasil, Colombia, Argentina, México y EE. UU.

Hay más teorías sobre por qué en Europa se suele mezclar el cannabis con el tabaco. Hubo una época, durante las décadas de los 60 y los 70, en la que en estos países solo se fumaba el hachís que venía de Marruecos y países de Oriente Medio. Como los cigarrillos de hachís son más fáciles de fumar con tabaco, cuando el uso de la hierba fue más común, este hábito se aplicó también a liar porros de marihuana.

Otro estudio de la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SEMFYC) presentado este año ha desvelado que en nuestro país hemos bajado el consumo de tabaco de 12 cigarrillos a 10. Sin embargo, según los médicos de familia, se ha incrementado el consumo de cannabis y tabaco. Parece que aquí sigue siendo la combinación que más nos gusta.

Quizá se trate de una moda y dentro de muy poco todos vaporicemos nuestra hierba para ahorrarnos la combustión. O, quién sabe, a lo mejor la legalización del cannabis está muy cerca en nuestro país y en solo algunos años ya tengamos una industria que incluya comestibles, aceites, bebidas y toda clase de formatos. ¡Estaremos muy atentos!