La cochinilla: cómo combatir una de las plagas más voraces de la marihuana

El cultivo de cannabis es una actividad muy reconfortante que, sin embargo, puede convertirse en todo un reto si tus plantas son atacadas por una de las plagas más comunes (en especial en cultivos de exterior) como es la cochinilla. Por eso en este artículo te explicamos, paso a paso, cómo prevenir y eliminar este molesto intruso en tus plantas de cannabis.

La cochinilla es un pequeño insecto con un apetito voraz que se alimenta de la savia de las plantas de marihuana. Hasta los cannabicultores más experimentados se las han tenido que ver alguna vez con esta plaga, por ello, es importante conocer las medidas preventivas para evitarla, así como los métodos de tratamiento para su eliminación.

¿Qué aspecto tiene la cochinilla?

Estos pequeños hemípteros, de los que existen aproximadamente 1.500 especies diferentes en la superfamilia Coccoidea, poseen un cuerpo blando y aplanado de forma ovalada que puede medir de 1 a 5 milímetros, pero su apariencia varía según la especie. El tipo de cochinilla que suele atacar a las plantas de cannabis es la Planococcus Citri, comúnmente conocida como “cochinilla algodonosa o harinosa”, así como también la cochinilla parda, que tiene un caparazón resistente en forma de escudo de color marrón.

La cochinilla algodonosa es muy fácil de reconocer porque aparece cubierta de una secreción cerosa blanquecina con aspecto algodonoso que utiliza para proteger sus huevos. Se adhiere en las ramas, así como en el espacio que se encuentra entre las hojas y los tallos de la planta; y desde ahí succiona la savia, debilitando las plantas de marihuana, causando todo tipo de problemas en su desarrollo. Pero además, puede atraer y ser el vector para otros insectos y enfermedades.

Su rápido desarrollo provoca que puedan coexistir varias generaciones de cochinilla en una misma temporada. Una capacidad de proliferación que, como curiosidad, ha hecho de él un insecto muy rentable a lo largo de la historia, gracias al rojo carmín o ‘rojo cochinilla’, uno de los pigmentos naturales más utilizados en el mundo, que se obtiene del cuerpo desecado y machacado de la cochinilla grana hembra (Dactylopius coccus), un insecto parásito del nopal, el cactus nacional de México. El valor de este pigmento ya era conocido por los aztecas antes de la llegada de los españoles a América y, a partir del siglo XVI, se produjo en Europa una gran obsesión por conseguir este pigmento rojo perfecto, convirtiéndose en uno de los productos de ultramar más valiosos.

Ciclo de vida de la cochinilla

La cochinilla atraviesa diferentes fases a lo largo de su vida que varían según el sexo del individuo, ya que presenta dimorfismo sexual, es decir, los machos y las hembras adultas son físicamente diferentes:

• En el caso de la cochinilla hembra, estas experimentan la fase de huevo, tres fases de ninfa y finalmente la etapa adulta.
• Los machos, sin embargo, pasan por la etapa del huevo, dos fases de ninfa y un periodo de pseudopupa, para finalmente convertirse en adultos. Comúnmente, los machos tienen alas y no se alimentan al carecer de aparato bucal, por lo que su única función al emerger del capullo tras su última muda es fecundar a las hembras.

¿Qué daños causa la cochinilla en las plantas de marihuana?

La cochinilla afecta a la vitalidad y el vigor de las plantas de cannabis, ya que se alimenta de su savia, con lo que impide su correcto desarrollo. Si este insecto se instala en tu cultivo durante la etapa vegetativa, podría obstaculizar el crecimiento de nuevas ramas y hojas, ralentizando los procesos de la planta y haciendo que no alcance la estructura necesaria para producir una buena cosecha.

Durante la fase de floración, la cochinilla puede hacer que disminuya la cantidad y la calidad de la producción de flores, con lo que tu preciada cosecha también se podría ver comprometida.

La amenaza de la cochinilla no radica únicamente en su apetito, sino también en su capacidad de reproducción, ya que las hembras pueden llegar a poner hasta 2000 huevos en condiciones ambientales óptimas, aunque lo normal son de 300 a 500 huevos. Esto significa que la plaga podría convertirse rápidamente en una infestación grave; además, los individuos macho tienen la capacidad de volar para buscar hembras para aparearse y así expandir sus dominios.

Por si esto fuera poco, la cochinilla, al succionar la savia, puede infectar a la planta con toxinas que pueden transmitir distintos virus. Para poner la guinda del pastel, estos insectos secretan una especie de melaza que, aparte de atraer a las hormigas, puede hacer que proliferen hongos como el tizón o la negrilla. Todo un combo letal que puede complicar las cosas mucho hasta para el cultivador más experimentado.

¿Cómo prevenir la aparición de la cochinilla en las plantas de marihuana?

La cochinilla prolifera en ambientes cálidos y secos, así que, ya sea en cultivos de interior como de exterior, debes hacer lo posible para intentar ponérselo difícil:

• En cultivos de interior, mantén una buena ventilación y controla la temperatura para que no sea demasiado elevada (dentro de los parámetros que las plantas de cannabis necesitan para desarrollarse correctamente).
• Inspecciona regularmente tus plantas de marihuana en busca de las primeras señales; presta especial atención a los tallos y a la parte del envés de las hojas, así como también en la unión entre el tallo y las ramas.
• Busca rastros pegajosos de melaza o directamente la cubierta blanca que protege a este insecto.
• Favorece que se instalen enemigos naturales de la cochinilla, como por ejemplo las mariquitas o las avispas parasitarias.
• Coloca trampas adhesivas amarillas, los machos quedarán pegados en ella, ya que pueden volar y te será más fácil identificar esta plaga.

¿Cómo eliminar la cochinilla de las plantas de marihuana?

Si aun con todas las medidas de prevención, la cochinilla ha logrado colarse en tu cultivo de cannabis, será crucial que actúes cuanto antes para que la plaga no se extienda. Detectar y separar del resto las plantas infestadas será la primera medida que deberás tomar, para luego proceder con un tratamiento para eliminarla:

• Retirada manual:humedece un algodón en una solución jabonosa con alcohol de quemar y retira cuidadosamente las cochinillas que vayas encontrando en las ramas y hojas. Recuerda que la cochinilla se “engancha” a la planta y se esconde bajo su cubierta protectora, por lo que puede resultar una tarea muy laboriosa; sin embargo, es la manera más eficaz de asegurar que te deshaces de ellas.
• Después de la eliminación manual, revisa tus plantas diariamente y retira alguna posible cochinilla que se haya librado de la primera eliminación.
• Limpia los residuos pegajosos que deja la cochinilla algodonosa a su paso con jabón potásico para evitar la aparición de hongos y hormigas.
• Si las hormigas ya han aparecido en tu cultivo, atraídas por la melaza de la cochinilla, deberás eliminarlas también.
• Durante la fase vegetativa puedes utilizar piretrinas orgánicas para eliminar la cochinilla de tus plantas de marihuana.
• Tras la cosecha, examina minuciosamente los cogollos para asegurarte de que no haya cochinilla en ellos.

Tanto con la cochinilla, como con cualquier otra plaga, enfermedad o patógeno que puede amenazar a tu cultivo de cannabis, la prevención es clave. Recuerda que mantener una higiene correcta, así como unos buenos hábitos en tu cultivo, te evitarán muchos quebraderos de cabeza. Además, la rápida intervención será crucial para mantener una plantación saludable y libre de plagas. Por tanto, si detectas las primeras señales de que la cochinilla ha hecho su aparición, actúa con determinación. ¡Tus plantas de cannabis te lo agradecerán!